sábado, 9 de julio de 2011

Los Chavales Gurú

Todavía me acuerdo de aquel primer día. Yo me presente vestido como padrino de bautizo con mi cara de idiota y mi experiencia bajo el brazo. Todo parecía tan diferente a lo que me esperaba, y casi hubiera podido jurar que había salido de un laboratorio escolar para entrar a otro.

Tengo que aceptar que al ver que me involucraba a un equipo de chavales como yo me sentí aliviado, puesto a que ya me había mentalizado de que seria un mocoso trabajando con señores de basta experiencia. Para bien o para mal, esa tranquilidad me duro aproximadamente 15 minutos, pues rápidamente me di cuenta que esos chavales de ahí ya venían de regreso cuando yo a penas iba.

No voy a negar que mis primeros días fueron complicados, y hasta tuve la oportunidad de tumbar un servidor y cometer algunos otros errores un poco grandes, pero de una manera o de otra, los chavales gurú me fueron guiando por el camino de la verdad, hasta que deje de ser una carga y comencé a ser algo mas o menos de utilidad.

En realidad no estoy seguro de como, ni mucho menos de en que momento, pero sin darme cuenta, un día ya éramos un equipo. Como en todo equipo peleamos, justificamos, perdonamos, volvimos a pelear y porque no, hasta limamos asperezas con un poco de alcohol... bueno, no con tan poco alcohol, pero a fin de cuentas, siempre seguíamos siendo equipo.

Hoy, por razones mas complicadas de explicar que de aceptar, tengo que separarme de esos chavales que me enseñaron a ser gran parte de lo que soy. Mas allá del melodrama para el cual me pinto solo, y lejos de las adulaciones que se dicen nada mas porque si, les dejo mi gratitud y mi respeto, porque aunque ya no son... bueno, ya no somos unos chavales, crecimos juntos y nos vimos caer, pero jamás detenernos. Por eso, entre algunas otras razones complicadas, para mi siempre serán los chavales gurú que conocí el primero de marzo de aquel ya lejano 2006.

2 comentarios:

Hondita dijo...

La vuelta de la vista al pasado es gratificante, siempre nos hace llegar a los momentos de nostalgia y sobretodo a todo a los inicios de lo que somos ahora.

todos los proyectos interesantes siempre inician de una manera que deja impactada nuestra vida, pero a veces, es necesario seguir adelante y llevarlos como amuletos del exito.

mucha suerte en tu nueva aventura :D

Creeperius dijo...

Totalmente de acuerdo chaparrita, siempre hay que seguir adelante. Gracias por acompañarme en este camino a veces tan accidentado y a veces tan suave y placentero. Te amo.