martes, 2 de abril de 2013

El amor es un ladrón...

Uno que viste de etiqueta, que derrocha carisma y excelentes modales, pero un ladrón al fin. Antes creía que era un mago que nos cambiaba la vida en un solo acto, pero ahora creo que es mas bien un ladrón con cierta habilidad de ilusionista

Y es que cuando no nos roba sonrisas, nos roba al menos una lagrima.

6 comentarios:

Shannycita dijo...

Hacia tiempo que no me daba una vuelta por aqui y me da gusto saber que eso de escribir sigue siendo lo tuyo... por cierto estoy de acuerdo cotigo sin embargo "mago" o "ladron ilusionista" sigue siendo encantadoramente magico ;)

Creeperius dijo...

Bueno, primero que nada bienvenida nuevamente, un honor que nos visites.

Ya entrando en materia, siempre he creído que escribo mas por necesidad que por habilidad, pero te agradezco mucho el cumplido.

En cuanto a lo del sujeto en cuestión, pues… creo que tienes razón. Nadie puede negar que sin importar si se va o se queda, si nos engaña o siempre no nos cuenta la verdad, mientras nos acompaña, hace de la vida toda una fiesta. ¡Un abrazo!

Hondita dijo...

Ilusionista como generador de emociones o ilusionista como generador de engaño? de esas preguntas sin respuesta.

Creeperius dijo...

Creo que aplica para ambos casos. No siempre, no al mismo tiempo... Pero puede aplicar a ambos.

Gianina Montivero dijo...

Me divirtió mucho lo que escribiste... en parte por una situación que estoy viviendo con alguien con quien ya no salgo. ¿Llamarlo amor? No creo. Pero él me gustaba mucho. La cuestión es que ahora me debe dinero... (eso es lo único que nos vincula) así que le di una interpretación muy!!!! personal al texto. Te mando un saludo... recién empiezo a leerte.

Creeperius dijo...

Creo que parte de la magia de las letras es justamente eso, que cada uno le damos un significado diferente y lo vamos aderezamos de experiencias y emociones propias.

Muchas gracias por tomarte el tiempo de leerme y enriquecer el blog con tu toque personal, espero leerte de vuelta.